miércoles, 12 de septiembre de 2007

mi casa

Ese olor empezó a cubrir toda la casa
Crecía con la humedad
Brotaba por la juntura de los mosaicos
O de las paredes.
No podía precisar por donde
Pero olía

Al poco tiempo todo apestaba
No pude detenerlo cuando empezó
En mi pieza
Lo atribuía al par de medias sucias
Pensaba que al sacarlas desaparecería
Ja! Que ingenuo

Ya lo sentía cuando entraba
Desde el pasillo
Aunque a veces pensaba que desde la esquina
Olería
Como cadáver
Enterrado...
Húmedo...

Que desesperante recordar eso
Pasé una semana entera rastreando ese olor
Tras los muebles, ¿carne podrida en la heladera?
Ya no me visitaba nadie
¿Sería la yerba en la maceta?
¡Que mierda¡ olía a culo de mono

Bueno ¿qué importa?
Ya me acostumbré

Es terrible la soledad...
Que feo huele.

No hay comentarios: